lunes, 8 de abril de 2013

Tiempo de Depurar

Los inicios de otoño y primavera son épocas recomendadas para realizar ayunos y promover la depuración corporal. Tanto durante el verano como en el invierno solemos excedernos en lo que comemos y bebemos y nuestro cuerpo se ve resentido por el sobre aporte de grasas y sustancias tóxicas que ingresan a él, desfavoreciendo sus diversas funciones orgánicas y deteriorando especialmente las labores realizadas por nuestros órganos depuradores. Estos son encargados de recibir, guardar y eliminar todo lo que entra al cuerpo y luego a la sangre, y gracias a ellos nuestro medio interno puede permanecer limpio y bien nutrido, para alimentar cada célula, dirigir la energía donde es más necesaria, retirar los desechos celulares y generar un estado de armonía y equilibrio.

No es difícil comprender que al recibir nuestros emuntorios (hígado, riñones, pulmones, intestino y piel) más basura que la que logran eliminar, el colapso que viene de uno o varios de ellos es inminente
.  Y su manifestación en diversos órganos y sistemas es lo que en la actualidad recibe el nombre de "enfermedad".

En el post anterior hablamos en extenso sobre estos temas, para aclarar por qué los cuerpos se enferman, basándonos en la teoría de la salud por medio del terreno celular limpio y bien nutrido

Hoy comparto el mensaje de depuración diaria tan necesaria en estos tiempos. Limpiar nuestra mente, así como nuestro cuerpo, de todo lo que nos pesa y sobra para vivir en equilibrio,  es fundamental para abrirnos a recibir lo nuevo y nutrir con amor lo que hemos descuidado a lo largo de años de des-atención y des-información. Cuerpo y mente funcionan en conjunto y se afectan mutuamente. Es por esto que al cambiar nuestro estilo de vida y alimentación hacia otro bien nutrido y bajo en toxinas, no sólo nuestro cuerpo se beneficia, sino también, nuestra salud mental y me atrevería a decir, también social y espiritual. Pensamos más claramente y empezamos a cultivar emociones  y pensamientos más positivos, amorosos y creativos.  

Así como los árboles liberan sus hojas para renovarse y en unos meses más permitir nacer la nueva vida entrando en primavera, nosotros podemos purificarnos y liberar aquello que nos pesa y que ya cumplió un ciclo. Limpiar y vaciar es necesario para recibir y dar espacio al nuevo Yo que deseamos ser.

P
or todo esto, y considerando que estamos comenzando el Otoño en la parte más baja de Sudamérica, qué mejor que hacernos un regalo cada mañana y darle a nuestro cuerpo una rica y nutritiva depuración frutal? Ya cambiando nuestro desayuno por frutas , jugos detox o licuados de frutas y hojas estamos dando grandes pasos en pro de la limpieza de nuestro sistema digestivo, sangre, tejidos y células. 




No necesitamos de mucha sofisticación ni ingredientes difíciles de conseguir para lograrlo. Las frutas y hojas verdes, de cada estación y localidad, son los mejores componentes de una dieta depurativa y equilibrada en nutrientes esenciales. Cada una aporta diversidad , así que ir variándolas a lo largo de días y semanas, nos asegura que estamos incorporando la inmensa gama de nutrientes que nuestra especie requiere para mantenernos fortalecidos y sanos.



Los invito a cambiar su desayuno y comenzar a preparar jugos y batidos depurativos. Compartiré algunas recetas que yo voy preparándome y los invito a visitar el facebook de Chirimoya Alegre para conocer muchas más opciones y conectarnos en esta red viva , cruda y verde ;)


Hoy:  Jugo de Luz
Este jugo es de los primeros jugos detox que conocí. Su nombre viene de la clorofila que aportan las hojas verdes y cómo nos llena de energía al beberlo, oxigenando nuestras células, y aportándonos un montón de nutrientes vivos. Al beberlo y recibir luz del sol, se fabrica más vitamina D en nuestra piel, que es aprovechada para ayudar en la obtención de mayor calcio en nuestros huesos.  Es un jugo muy alcalinizante y depurativo. Beber y disfrutar cada sorbo sin prisa.

Ingredientes
(Rinde 1 litro)

-          3 manzanas rojas ( o 3 tazas de uvas en época de verano)
-          1 pepino verde (de ensalada)
-         1 a 5 tazas de hojas verdes de elección (espinacas, acelgas, rúculas, lechugas, col rizada, hojas de zanahoria, de beterraga, de coliflor, de brócoli….)
-          Muy poca agua
-        La receta original lleva 1 o 2 puñados de semillas germinadas, como maravilla o cáñamo. Yo evito mezclar frutas y semillas, pero a veces en esta receta las incluyo. Lo mismo con un pedazo pequeño de jengibre.


Preparación
Si se tiene un exprimidor de alimentos, entonces exprimir cada uno de los ingredientes y luego servir.

Si no se tiene, entonces en la licuadora (juguera), añadir primero el pepino en cubitos (es más jugoso, por tanto moler primero), el agua y las manzanas cortadas pequeñas. Licuar. Añadir las hojas. Añadir las semillas y licuar. Finalmente pasar la mezcla por un cedazo o paño filtrante (en último caso, colador).


Servir y beber lentamente, reconociendo que el alimento es vida, es salud, es belleza y energía.

¡Salud!

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